-

Según estudios realizados que estudiaron este fenómeno, las pesadillas se tienden a relacionar con ciertas enfermedades mentales, algunos sueños vívidos pueden ayudar para procesar las emociones del día anterior, así lo explica la psicóloga de la Universidad de Tulsa, Joanne Davis.

Los estudios han comenzado a descifrar y comprender los vínculos que hay entre los sueños, los trastornos psicológicos y la importancia que se les debe dar para así mantenernos estables emocionalmente cuando tenemos buena salud. Cuando dormimos organizamos y guardamos nuestros recuerdos y reactivamos  y reorganizamos antiguos recuerdos.

En la actualidad se cree que las pesadillas suceden en la etapa del movimiento ocular rápido que se denomina sueño rem, este se da en el momento antes de despertar o de llegar a sumergirse en un profundo sueño.

Los psicólogos han planteado la hipótesis de “dormir para olvidar” que está fundamentada en que el sueño rem realiza un fortalecimiento de los recuerdos emocionales que son almacenados de forma segura y así disminuir reacciones a eventos posteriores. Por ejemplo, podría ser algún percance que ocurrió durante un día de trabajo, para luego soñar con algo relacionado a ello, llevando a que por la pesadilla, la próxima vez que suceda algo, la reacción sea de menor alteración en un momento real.

Al momento de estar en la etapa rem del sueño, el hipocampo y la amígdala están activos, la primera es una parte de nuestro cerebro que se encarga de ordenar y archivar los recuerdos; mientras que la segunda ayuda a procesar las emociones.

Esto hace ver que una parte del cerebro se prepara para sentir miedo por lo cual resulta positiva, debido a que se consigue entrenar a la persona para ciertas ocasiones o situaciones  en un plano real. Así pues es de suma importancia considerar a las pesadillas como un indicador temprano de algún problema en el futuro.

Hay que tener en cuenta que hay que prestar más atención si las pesadillas ocurren de forma regular o que de alguna forma comienzan a afectar la salud. Sin embargo, para la mayoría de las personas, un mal sueño puede significar algo bueno.

Escribir un comentario